Fabes “de la abuela”
La cocción debe realizarse a fuego suave y con la cazuela a medio tapar
Dificultad: media Preparación: 3 horas+remojos y reposo
Calorías: 3487 Congelar: no
Calorías: 3487 Congelar: no
Ingredientes para 4 personas500 g de fabes de La Granja • 250 g de panceta curada • 2 chorizos asturianos • 2 morcillas asturianas • 200 g de hueso de jamón • aceite de oliva • perejil • 5 hebras de azafrán • sal.
1 Lava las fabes y desecha aquellas que estén dañadas. Déjalas en un bol con agua fría en remojo durante la noche, normalmente, 12 horas. Al día siguiente, escúrrelas y resérvalas hasta el momento de prepararlas. Pon a remojo, en agua templada, la panceta curada y el hueso de jamón también desde la noche anterior a la preparación de las fabes.
2 Añade en una cazuela, a ser posible baja y ancha, las fabes y agua que las cubra más un par de dedos por encima de las mismas. Calienta a fuego alto hasta que rompa a hervir. Cuando empiece a hervir, introduce la panceta, los chorizos, el hueso de jamón y las morcillas (previamente pinchadas para evitar que revienten). Procura que las morcillas y los chorizos permanezcan siempre en la parte superior pare evitar posibles roturas que estropearían la fabada.
3 Desespuma durante unos minutos. Cuando lleve 1/2 hora cociendo a fuego alto, añade las hebras de azafrán diluidas en un poco de caldo caliente de la cazuela. Baja la temperatura de cocción. Deja que las fabes se cocinen lentamente (a temperatura baja) durante dos horas, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera con cuidado de no romperlas. Durante estas dos horas, añade agua fría en dos ocasiones para “asustar” las fabes (rompe el hervor y ayuda a su perfecta cocción).Prueba las fabes para ver si ya están tiernas y rectifica de sal. Una vez probadas y tiernas, apártalas del fuego y déjalas reposar una hora, aproximadamente. A continuación, retiramos los chorizos, la morcilla, la panceta y los huesos de jamón. Trocea todo. Sirve las fabes en un plato hondo con la carne encima y una pizca de perejil.
2 Añade en una cazuela, a ser posible baja y ancha, las fabes y agua que las cubra más un par de dedos por encima de las mismas. Calienta a fuego alto hasta que rompa a hervir. Cuando empiece a hervir, introduce la panceta, los chorizos, el hueso de jamón y las morcillas (previamente pinchadas para evitar que revienten). Procura que las morcillas y los chorizos permanezcan siempre en la parte superior pare evitar posibles roturas que estropearían la fabada.
3 Desespuma durante unos minutos. Cuando lleve 1/2 hora cociendo a fuego alto, añade las hebras de azafrán diluidas en un poco de caldo caliente de la cazuela. Baja la temperatura de cocción. Deja que las fabes se cocinen lentamente (a temperatura baja) durante dos horas, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera con cuidado de no romperlas. Durante estas dos horas, añade agua fría en dos ocasiones para “asustar” las fabes (rompe el hervor y ayuda a su perfecta cocción).Prueba las fabes para ver si ya están tiernas y rectifica de sal. Una vez probadas y tiernas, apártalas del fuego y déjalas reposar una hora, aproximadamente. A continuación, retiramos los chorizos, la morcilla, la panceta y los huesos de jamón. Trocea todo. Sirve las fabes en un plato hondo con la carne encima y una pizca de perejil.
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