El verdadero drama de Ana Obregón y su caída en desgracia dentro de la prensa rosa

En el mundillo rosa era muy recurrente la frase “el día que Ana Obregón no vea paparazzis en la puerta de su casa se morirá de pena”. Ese día ha llegado y la bióloga no sabe qué hacer para volver a la primera plana mediática. Atrás quedan sus éxitos junto a Ramontxu García en TVE, sus míticos posados veraniegos (los últimos con patrocinador) y los mordiscos de su hijo a las “alcachofas” de los reporteros.

Su último éxito, Ana y los 7, cerró sus puertas hace ya doce años y la Obregón parece no haberse repuesto de su traumático final, con enganchón con los productores que se vengaron matando a su personaje en el epílogo de la serie familiar. La actriz y presentadora quizás pensaba que el reality-show Algo pasa con Ana iba a relanzar su carrera, pero las duras críticas y las grises audiencias que cosechó no ayudaron a ello. Pese al fracaso, ella sostiene que DKiss le ha ofrecido grabar una segunda temporada pero ella se niega, aunque algunos quieren ver en esta reacción como el enésimo capítulo de las aventuras de “Antoñita la fantástica”.

Por eso ahora parece empeñada en pisar charcos ante la indiferencia general. Ocurrió hace unos días cuando aprovechó una manida broma de Javier Cárdenas sobre el título de Biología de la actriz, que se vengó recordándole su supuesta mala audiencia con la prueba académica en su mano. Pero no es la primera vez que Obregón parece empeñada en regresar, ya que pocos entendieron su bajada de pantalones al prestarse a participar en Firts Dates, donde intentó encontrar el amor en el especial de San Valentín: “Hace unos meses me encontré cenando con Carlos Sobera, que es amigo mío, y le dije de coña: ‘A ver si me llevas a encontrar novio’, pero cuando me llamaron del programa lo primero que dije es que no, que me daba mucha vergüenza. Al final me convencieron y la verdad es que es toda una experiencia. He estado muy nerviosa, algo que es difícil en mí, porque después de tantos años ya no me pongo nerviosa delante de una cámara o en un escenario”.

Ana Obregón no habrá visto con buenos ojos cómo la productora de Ana y los 7 resucita el concepto de la serie con iFamily sin contar con ella, que pretendía resucitar el papel de la niñera erótica en TVE: “Sería muy bonito que los espectadores vieran eso que se grabó y cómo serían las cosas hoy en día”, pero, claro, el problema de esta nueva trama es el hecho de su muerte, algo que ella tiene completamente controlado: “Yo ya tengo la idea y utilizaría todo eso, porque parecía que sí, pero luego no… Hay imágenes grabadas de todos nosotros en el aeropuerto yéndonos de viaje”.

Es cierto que en otras ocasiones Ana Obregón no tiene más remedio que salir ante la planta mediática por obligación, tal y como le ocurrió hace unos días cuando escribió un mensaje para puntualizar sobre la salud de su padre: “Hoy estoy feliz porque la operación de mi padre ha salido bien. Y muy agradecida a tod@s por vuestros mensajes de cariño y apoyo después del intento de desprestigio y ataque de un programa de televisión sin motivo ninguno que he tenido que sufrir en uno de los momentos más difíciles de mi vida teniendo a mi padre al lado en el hospital ingresado. Gracias de corazón por estar tantísimos años a mi lado. #agradecida #blessed #familia #respeto #amordehija”.