Paula Echevarría y Miguel Torres, un año de su historia de amor contra viento y marea

Hace justamente un año Paula Echevarría recibía un regalo de navidad anticipado y aunque no llegaba con un lazo en la cabeza, sí que lo hacía para cambiar su vida y llenarla de felicidad después de un mal momento. Se trata nada más ni nada menos que de Miguel Torres.

   El futbolista del Málaga y la actriz comenzaban una relación hace un año tras volver a coincidir en el cumpleaños de una buena amiga, saltando las chispas entre ellos después de protagonizar un apasionado videoclip de David Bustamante. Pero la realidad supera la ficción y tras el polémico divorcio de el cantante y Paula, la asturiana volvió a sonreír gracias al futbolista.

   Y lo que empezó como un rumor ha resultado una historia de amor de lo más consolidada. Paula y Miguel empezaron ocultando su amor y jugando al despiste, sin confirmar si eran ciertas las noticias que les vinculaba. La pareja empezó viéndose en un piso del centro de Madrid, al que ambos entraban en sus respectivos coches sin hacer declaraciones a las decenas de reporteros y paparazzis que les acompañaban en la entrada.

   Pero al poco tiempo Paula firmó su divorcio con Bustamante y dejó de esconder su amor con Miguel Torres, convirtiéndose prácticamente en su sombra. Visitas al campo de Málaga, reuniones de amigos, paseos de la mano por Madrid, besos en redes sociales e incluso vacaciones juntos. Pero lo más importante, es que Paula dio el gran paso y hasta pudimos ver a su hija Daniella con una camisa del jugador madrileño, algo que no sentó muy bien al padre de la pequeña.

   Pero contra viento y marea y aunque al principio muchos no apostaban por su relación, Paula y Miguel han conseguido hacer un año juntos y su relación cada vez está más consolidada y pasan más tiempo juntos.

   La actriz se está construyendo una casa nueva en Madrid y Miguel ha estado muy pendiente de las obras, acompañando a su pareja en todo momento, además ha sido su mejor apoyo ante la presión mediática con la que han tenido que librar. Y es que los cimientos de su relación parecen más fuertes que los del propio chalé y estamos seguro que hoy lo celebraran como merecen.