La Reina Letizia indignada con las costumbres de Juan Carlos I

La Reina Letizia se ha negado a volver a Baquiera Beret   | CEDIDA

 

Tras iniciarse en 2004 en la costumbre real de ir a esquiar anualmente a Baqueira Beret, la Reina Letizia repitió un año después pero desde esas jornadas de 2005 no ha vuelto. Y es que parece que la actual reina no quiere seguir con la tradición impuesta por el rei emérito Juan Carlos I. Pese a que en un primer momento la prensa rumoreó que la ausencia de Doña Letizia mostraba poco interés de la mujer de Felipe VI por uno de los deportes favoritos del Rey, parece que su ausencia en Baquiera se debía a motivos morales más que deportivos.

Como informa La Otra Crónica, Letizia no se sentía cómoda usando la lujosa casa que los Borbón tienen a su disposición una casa en La Pleta, la urbanización más exclusiva de la zona. Pese a no ser suya, los reyes tienen este chalet disponible durante todo el año. Según fuentes de la Casa Real: «Doña Letizia no va a volver a Baqueira, porque hacerlo supone hacer uso de un privilegio que tiene por su condición de reyes y ese no es el estilo de Felipe VI». Pese a eso la familia seguirá acudiendo a diferentes pistas para disfrutar de este deporte. Desde el estreno de la Princesa de Asturias en la nieve con apenas cinco años, los viajes al estranjero para deslizarse por diferentes pistas de esquí han sido continuos. En 2012 estuvieron en la estación canadiense de Whistler, Canadá y en la Semana Santa de 2014 estuvieron en Couchervel, una estación de esquí en los Alpes franceses situada a una hora de Ginebra, Suiza. 

 

 

Además, el pasado 4 de febrero los actuales reyes, acompañados de sus hijas, aparecieron por sorpresa en la estación de esquí de Astún para pasar un día en la nieve. Según ha explicado un responsable de seguridad: «Sus escoltas llegaron varios días antes, imaginamos que para controlar la seguridad. La familia reservó la suite, que es una habitación de dos estancias y un saloncito que vale 300 euros la noche, lo pagaron todo ellos». En el hotel, que ha abierto hace tan sólo cuatro meses, la visita se ha calificado como «lo mejor que nos podía pasar» y han asegurado que, aunque les avisaron con poca antelación, no generaron ningún inconveniente. La familia recibió a los medios a primera hora de la mañana para las fotos de posado y se quedaron esquando hasta que cerró la estación.